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Pulsera fabricada en oro amarillo de 18Kts con serpiente con ojos rubí de 40mm. Cadena hueca.
Largo 19cm.
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La pulsera Boah es el encanto de lo prohibido. Hay joyas que adornan… y hay joyas que hechizan. La pulsera Boa pertenece, sin duda, a este segundo linaje. Confeccionada en oro amarillo de brillo solar, esta pieza sinuosa rinde homenaje a una figura ancestral que ha fascinado a civilizaciones desde el principio de los tiempos: la serpiente. Lejos de ser solo un motivo estético, la serpiente ha sido durante milenios un símbolo de poder, transformación y eternidad. En las culturas antiguas, era venerada como protectora de la sabiduría, guardiana de secretos y emblema de renacimiento, gracias a su capacidad de mudar la piel. En otras tradiciones, representa la energía vital y la sensualidad latente. Boa se inspira en toda esta simbología para convertirse en mucho más que una joya: una declaración de fuerza, magnetismo y misterio. La pulsera presenta una estructura de cadena hueca, lo que le otorga ligereza sin perder presencia ni solidez. Esta característica no solo mejora la comodidad al llevarla, sino que también permite que la joya se mueva con fluidez y se adapte con gracia a la muñeca, como si realmente tuviera vida propia. El diseño abraza la forma de una serpiente estilizada que se enrolla con elegancia en torno a la muñeca. Los detalles están meticulosamente trabajados, con escamas suaves que capturan la luz y una cabeza definida que culmina en dos intensos ojos de rubí. Estas gemas, de rojo encendido, aportan un contraste fascinante con el oro amarillo: como dos brasas encendidas, otorgan profundidad, carácter y una chispa de misterio a la pieza. Los rubíes, conocidos como piedras del amor y la pasión, intensifican el simbolismo de la pulsera. No solo embellecen la mirada de la serpiente, sino que también evocan fuego interno, protección emocional y poder femenino. En muchas culturas, se creía que el rubí tenía el poder de repeler el mal y atraer el éxito. Así, los ojos de Boa no solo miran: protegen, vigilan y revelan. Boa no es solo un accesorio. Es una joya con historia, con poder simbólico, con alma. Es perfecta para quienes se sienten conectadas con su lado más instintivo, aquellas que han aprendido a cambiar, a crecer, a dejar atrás pieles viejas para renacer con más fuerza. También para quienes desean destacar con una pieza audaz, sin perder ni un ápice de elegancia. Llévala sola, como una declaración de fuerza, o acompáñala con otras joyas doradas para crear una narrativa visual personal. Boa es seducción y sabiduría. Es un secreto envuelto en oro. Una joya que no susurra… sino que hipnotiza.